Morales cada día más cerca de ser expulsado de Argentina

Ya son tres señales que evidencian una inminente salida de Evo Morales de Argentina. Sin embargo, parece que Morales no decide aún si retornará al país o irá en busca de otro gobierno que esté dispuesto a darle Asilo.

La primera señal la dio Raúl Zaffaroni, quien se presentó como defensor de Evo, a pesar de continuar siendo juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Zaffaroni mencionó que la extradición de Morales no procede debido a que los supuestos actos de sedición que se le atribuyen se suscitaron en plena presidencia de Morales, y siendo él presidente es inmune a la justicia. Por ello no pueden extraditarlo. Esto revela que habrá una petición del gobierno boliviano al argentino para extraditar a Evo. En dicha oportunidad se barajea una posible salida de Evo de Argentina contra su voluntad, pero no por ello cierta. 

El segundo hecho se da cuando Morales afirma que prefiere ir preso a Bolivia que perjudicar a la Argentina. Dicha afirmación se dio en el marco de las negocioanes que realiza el gobierno de Fernández con el Fondo Monetario Internacional para acceder a un préstamo para tratar de estabilizar el desastre de la economía del país del sur. Una de las condiciones del FMI sería el silenciar a Morales o expulsarlo del país.

La tercera señal se produjo el día de ayer cuando un partido político Argentino, la Unión Cívica Radical anunció que buscará los mecanismos para que se le retire el estatus de refugiado político a Morales por no respetar lo que se acordó con el ejecutivo que era evitar declaraciones políticas, además por los actos de sedición que comete Morales contra el gobierno boliviano, como tratar de organizar milicias armadas. 

Morales una vez más esta ente la espada y la pared, a pesar de que dice preferir estar apresado antes que perjudicar a la Argentina, se observa que sus defensores impedirán que lo extraditen. Morales es un hombre de lujos, los tuvo en Bolivia, los tuvo en México y los tiene en Argentina. 

Por lo que a Evo Morales, según mi parecer, le quedan dos opciones. La primera es cerrar la boca y dejar de cometer exabruptos que rozan la estupidez internacional. La segunda es encontrar otro país que esté dispuesto a costear los lujos y socapar las declaraciones de Morales. Pará mí no sería ningún sorpresa que él prefiera y termine haciendo lo segundo. 

Por: Augusto Diaz